
Gestión Populista: La cesta de la compra sube un 38,5% y golpea a las familias españolas.
La inflación sigue castigando a los hogares españoles y pone en evidencia los efectos de una gestión económica marcada por decisiones de corte populista.
La inflación sigue castigando a los hogares españoles y pone en evidencia los efectos de una gestión económica marcada por decisiones de corte populista. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el precio de la cesta básica de alimentos ha experimentado un aumento del 38,5% en el último año, el mayor incremento desde 2008.
Este encarecimiento, que afecta especialmente a productos esenciales como el pan, la leche, los huevos, el aceite y la carne, está teniendo un impacto directo en el poder adquisitivo de las familias, particularmente en las de clase media y baja. "Nunca habíamos tenido que elegir entre llenar la nevera o pagar la luz", comenta Ana Rodríguez, madre de dos hijos y trabajadora a tiempo parcial en Sevilla.
Los expertos señalan que detrás de este fenómeno no solo está la inflación global, sino también decisiones internas que han contribuido a agravar la situación. Subvenciones generalizadas sin control, controles de precios mal diseñados y medidas fiscales con alto coste para el Estado han erosionado la confianza de los mercados y aumentado el déficit.
“La economía necesita responsabilidad, no fuegos artificiales. Medidas como la congelación artificial de precios o el aumento del gasto público sin respaldo productivo terminan pagando las consecuencias los ciudadanos, no los políticos”, explica Javier Morales, economista del Observatorio Económico Europeo.
Mientras tanto, el Gobierno insiste en que la situación es "transitoria" y que ya se están implementando políticas para revertir la tendencia. Sin embargo, los ciudadanos siguen notando el golpe en sus bolsillos cada vez que acuden al supermercado.
El aumento del coste de vida se convierte así en una de las principales preocupaciones de la población, mientras el debate político se centra más en la narrativa que en soluciones estructurales.